Central Park

De Kenia a Nueva York. Mis viajes no podían haber sido tan contrastados.

Alessandra y yo en Central Park

Ahora sé porque dicen que New York es una ciudad especial. Lo que más me ha sorprendido es lo amable y agradable que es la gente. No sé si es debido a la multiculturalidad de la ciudad, o bien al impacto que sufrieron tras el 11-S, el caso es que desde el principio te sientes un Newyorker más.

Mi condición de atleta me permite viajar alrededor del mundo y conocer de una manera diferente las ciudades. Cuando le comento a la gente que Central Park es lo que más me ha gustado de Nueva York, se quedan extrañados y me dicen “pero si es un parque”. Probablemente esas personas no han vivido como he vivido yo ESE parque.

Levantarte todas las mañanas a las 8 para ir a rodar por allí, es una experiencia única. Atarte los cordones de las zapatillas, salir del apartamento, correr unos minutos por las calles del Harlem hasta llegar a la entrada noroeste de Central Park. Penetrar en el parque, lleno de árboles y verde, muy salvaje, y recorrer cada esquina de él; bordear los lagos al mismo tiempo que ves alrededor los monstruosos edificios de la city…es un contraste muy grande y en ese momento parece que te has teletransportado a otro sitio. Cental Park es el pulmón de la ciudad, el lugar dónde desconectas del ritmo frenético que hay fuera. Te cruzas con miles y miles de corredores y corredoras. Da igual como vayan corriendo: con el carrito del bebé, con 5 perros enganchados a su alrededor, descalzos, con las nuevas zapatillas fivefingers, el ambiente es enérgico y lleno de vida, pero al mismo tiempo relajante. Si decides coger el camino asfaltado hay que tener cuidado: coches, ciclistas, patinadores, eso sí, todos bien organizados, tu carril y tu sentido de carrera dependerá de tu medio de transporte.

Natalia y yo en Brooklyn.

También es habitual encontrarte los sábados con alguna liguilla de béisbol en uno de los campos que tiene en su interior, ver gente jugando al fútbol, leyendo sobre una toalla en la Great Lawn, y sí, también ves la típica imagen de perro+amigos+frisbee. En este caso el deporte gana a los turistas, que también abundan en este parque.

El camino por el puente de Brooklyn y las vistas desde el otro lado son también una de las cosas que más me han gustado.

Letras luminosas en los restaurantes y Deli’s, anunciando Brunch, Lunch y Coffee, tiendas de tatuajes abiertas en mitad de la noche, las calles llenas de taxis amarillos, los puestos de hot dogs en cada esquina, la gente andando con el termo de café en la mano…THIS IS NEW YORK!

Central Park desde el Top Of The Rock